La guerra en Ucrania e Israel, el enfrentamiento entre EE. UU. y China y el limitado papel de Europa son los grandes ejes del actual panorama geopolítico internacional.
Fuente: IESE BUSINESS SCHOOL. Universidad de Navarra.
La actual fragmentación geopolítica en múltiples bloques está alterando el entorno económico empresarial. No en vano, la búsqueda de la eficiencia ha cedido el testigo a la adaptación al mundo multipolar de una nueva era: la de la post-Pax Americana.
Así lo creen el profesor del IESE Jordi Gual y Pol Morillas, director del CIDOB (Barcelona Centre for International Affairs), que, en la sesión Cambios en la geopolítica y su efecto en la economía y la empresa, analizaron los principales acontecimientos que están transformando el panorama geopolítico:
Oriente Medio. De acuerdo con Morillas, existen tres razones fundamentales detrás de este nuevo enfrentamiento. En primer lugar, un inexplicable fallo de seguridad en la contención de la franja de Gaza. Segundo, la crisis política en Israel por un gobierno cada vez más radical y las protestas de la sociedad civil israelí, que han tenido ‘ecos’ en otras partes de Occidente. Por último, el error de subestimar la importancia del conflicto con Palestina, considerándolo potencialmente inocuo para la seguridad de Israel.
Para los mercados financieros, este conflicto se ha resuelto de manera relativamente rápida. Los inversores parecen estar acostumbrados a los conflictos geopolíticos, hasta el punto de que incluso el índice S&P 500 cerró con un ligero aumento el 7 de octubre, día del ataque de Hamas a Israel. Según Gual, el impacto sobre el precio del petróleo podría ser muy modesto, siempre y cuando el conflicto no se expanda en la región. Sin embargo, este choque geopolítico podría rebajar las expectativas de crecimiento de los bancos centrales y llevarlos a reconsiderar su política monetaria ante un momento económico frágil, con una inflación sin reconducir. El resultado sería una política menos agresiva de los bancos centrales.
Ucrania. El conflicto entre Rusia y Ucrania se ha convertido en una guerra de desgaste. Será crucial observar hasta qué punto ambas partes pueden mantener la guerra operativamente, pero también sus apoyos políticos y económicos. En Estados Unidos, ciertos sectores del partido republicano muestran su cansancio por el apoyo a Ucrania y existen cada vez más..