Inteligencia emocional, serenidad y capacidad de transmitirla, confianza, comunicación directa y relación humana son las 5 habilidades sociales que nos permitirán sacar lo mejor de nuestro equipo
Liderar una compañía nunca ha sido una labor sencilla, requiere dedicación y esfuerzo, pero también de una serie de habilidades blandas que, ahora más que nunca, debemos reforzar. De este modo, si bien estas habilidades no han variado significativamente a raíz de la situación actual, es importante saber extrapolarlas al nuevo contexto y potenciar aquellas que nos ayudarán a comprender mejor a nuestro equipo y sacar lo mejor de él.
Para lograrlo, Udemy –la plataforma global de formación online más grande del mundo-, de la mano de su instructor David Bejarano, coach estratégico, revela las 5 habilidades imprescindibles para liderar adecuadamente una compañía en la nueva realidad.
- Inteligencia emocional. Gestionar un equipo a distancia no es tarea fácil y puede generar gran estrés. Por tanto, es importante tener empatía y una gran inteligencia emocional que permita gestionar situaciones inesperadas y los constantes cambios sin perder los estribos.
- Serenidad y capacidad de transmitirla. No solo es importante que nosotros como líderes mantengamos calma, sino que también seamos capaces de compartirla con los demás. Esto aumenta la confianza en nuestro liderazgo y en el trabajo que nuestro equipo está desempeñando. “Esta situación está poniendo a prueba nuestra habilidad de ser pacientes y nuestra capacidad de adaptación. Nos está obligando a entrenar estas dos habilidades que se han ido perdiendo en esta nueva generación de la gratificación instantánea”, afirma David Bejarano. “Es en los momentos de crisis en los que los verdaderos líderes muestran su valentía y resiliencia. Aquellos que entienden que no todo puede ser resuelto de un día para otro y que buscan formas de adaptarse a todo lo que se presente son los que logran mantenerse a flote”.
- Confianza en el equipo. Demostrar confianza en nuestro equipo no solo es esencial para su correcto desempeño, sino en general para la moral durante este momento de crisis. La confianza es el pilar del liderazgo y necesita ser expresada abiertamente.
- Comunicación directa. Aunque parezca tedioso, de esta forma minimizamos la cantidad de malentendidos que entre mensajes de texto y correos pueden llegar a surgir. Debemos ser bastante cuidadosos en nuestras comunicaciones y dedicar cada día al menos 5 minutos a hablar con nuestro equipo.
- Relación humana. El capital más importante de cualquier empresa son sus empleados y es necesario crear espacios en los que se pueda hablar más allá del trabajo y compartir experiencias personales durante esta época. Esto ayuda a fortalecer los lazos personales y liberar un poco de tensión.
“En estos tiempos vemos el resultado de nuestro liderazgo. Si hemos logrado fomentar un espacio de crecimiento, trabajo en equipo y, sobre todo, confianza en las habilidades de cada una de las personas que lideramos, el trabajo a distancia no repercutirá en la efectividad de los procesos de trabajo”, sentencia Bejarano. “Las personas a nuestro cargo conocen sus labores, los estándares de su desempeño y las expectativas del líder. Por lo tanto, lo único necesario en estos tiempos es reforzar nuestro compromiso de apoyar a nuestro equipo de la mejor manera posible”.